Nuevo revés a la Junta Electoral de Georgia

La Corte Suprema de Georgia negó a la Junta Electoral del estado, bajo control republicano, reestablecer una serie de reglas aprobadas al vapor este año y que un juez de una corte inferior había desestimado tras considerarlas “inconstitucionales y sin efecto”. Sin embargo, el fallo de la suprema no garantiza que las reglas entren en vigor en la votación del 5 de noviembre, dicen conocedores del tema.

Como reportamos oportunamente en este espacio informativo, una de dichas reglas, la que determina “contar manualmente los votos después del cómputo en las urnas electrónicas” había sido frenada la semana pasada por el juez del Tribunal Superior del Condado de Fulton, Robert McBurney.

El juez había dictaminó en la ocasión que la llamada regla del recuento a mano llegaba “demasiado, demasiado tarde”, y procedió entonces a bloquear su ejecución mientras consideraba los méritos del caso. Bajo la referida nueva regla tres cuartas partes de los votos demócratas habrían estado esta vez en riesgo si perdían los votos de tan sólo 12 distritos en tres condados, de los 159 distritos que hay en Georgia.

La Suprema consideró el conjunto de más de media docena de nuevas reglas, incluida la que exige el recuento manual de las boletas, que los críticos señalaron en su momento como una medida dilatoria para justificar retrasar y eventualmente impedir la certificación de las elecciones si el resultado era desfavorable a los republicanos.
Con este fallo de la Suprema en Georgia los demócratas y los grupos defensores de los derechos de voto se apuntaron una victoria parcIal, luego de haber demandado bloquear la referid decisión la Junta Electoral, una nueva mayoría de derecha que tomó su control en mayo.
Pero la corte federal en Georgia arguyó que la decisión de la junta se estaba imponiendo en fecha demasiado cercana a las elecciones, a riesgo de interrumpir la certificación. Afirman una supuesta necesidad de hacer las elecciones más seguras y transparentes, cuando parte del mismo personal de esa junta ha declarado repetidamente a la prensa que el de Georgia es un sistema electoral seguro y probado.

El Comité Nacional Republicano (RNC) presentó una apelación de emergencia directamente ante la Corte Suprema de Georgia para acelerar el proceso de apelación con el fin de que se apliquen las reglas para las elecciones del 5 de noviembre. Por lo general, el Tribunal de Apelaciones de Georgia es un paso provisional necesario antes de que el tribunal superior considere las decisiones del tribunal inferior.

Así que la Corte Suprema de Georgia decidió que celebrará audiencias sobre la apelación del RNC antes de decidir si los nuevos procedimientos electorales estarán en vigor en futuras elecciones.

Los votantes en Georgia han seguido acudiendo en número récord durante la segunda semana de votación anticipada. Hasta el lunes a las 3:30 p. m. la votación marcaba 1.5 millones de votos tempranos emitidos, y un millón 504 mil 332 registros, rompiendo récord histórico en estos rubros.

Georgia es considerada uno de los siete estados indecisos en estas elecciones, y las encuestas continúan mostrando una carrera reñida  entre la vicepresidenta demócrata, Kamala Harris, y el expresidente republicano, Donald Trump.

De acuerdo con el Georgia Recorder, “El presidente del Partido Republicano de Georgia, Josh McKoon expresó su frustración el martes por el último revés contra la amplicación de hacer cumplir las reglas de ‘sentido común’, que permitirían a los observadores electorales un mayor acceso a los centros de votación y darían a los miembros de la junta electoral del condado más discreción para verificar la exactitud de los resultados electorales”.

Los abogados del estado y los grupos republicanos argumentaron la necesidad apremiante de tener reglas para la presentación de informes diarios sobre las boletas en ausencia, los nuevos requisitos de identificación para dejar las boletas en ausencia en las urnas, el recuento manual de las papeletas y una mayor discreción para que las juntas electorales locales investiguen la forma en que un condado lleva a cabo una elección antes de la certificación.

Pero críticos de las medidas que ha tomado en los últimos años la junta forman parte del arsenal de tácticas de los republicanos para suprimir el voto de las minorías.

Con todo, a partir de este miércoles por la mañana más de 1.9 millones de personas habían emitido ya su voto temprano y sin problemas, según muestran los datos del Secretario de Estado de Georgia, Brad Raffensperger.