Nueva regla de votación en Georgia incidiría en la votación de 2024
Recientemente la junta electoral de Georgia instauró un grupo de reglas que en estas elecciones podrían influir en el resultado. Una de estas reglas, aprobada por la junta electoral del estado, dominada por los republicanos, podría por ejemplo permitir a las juntas electorales de tres condados excluir votos decisivos.
La nueva regla, “sugiere que los funcionarios locales en sólo un puñado de condados rurales podrían excluir suficientes votos como para afectar el resultado de la carrera presidencial de 2024”, dice un análisis periodístico de propublica, en unas elecciones tan cerradas como lo estuvieron las de 2020, cuando Trump perdió Georgia por menos de 12 mil votos.
Y es que las juntas electorales locales han sumado fuerzas en los últimos años con partidarios de la falsa afirmación de que Trump ganó en 2020 y cuestionan la integridad del proceso electoral. Y el 20 de septiembre la junta electoral del estado de Georgia votó 3-2 para exigir a todos los condados que realizaran un recuento manual de las papeletas emitidas el día de las elecciones para verificar las tabulaciones de la máquina.
De esta suerte, bajo la nueva regla tres cuartas partes de los votos demócratas estarían esta vez en riesgo en tan sólo 12 distritos de tres condados, de los 159 que hay en Georgia. Por lo pronto se ventilan litigios para saber si dicha regla se mantendrá vigente o no.
La regla establece que los votos de la elección en Georgia deberán contarse a mano después que hayan sido contadas electrónicamente, en busca de “inconsistencias” y con el fin de ralentizar el resultado de la elección, preparando el camino para no aceptar los resultados en Georgia, y por extensión retrasar la aceptación de los resultados en todo el país.
La legalidad de la referida regla electoral se debatió el 1 de octubre durante los juicios consecutivos por dos demandas. Una, de “el Comité Nacional Demócrata y otros” contra la Junta Electoral del Estado, buscando invalidar la regla. Y la otra, presentada por un miembro republicano de la junta local “contra su condado, el Comité Nacional Demócrata y otros”, apoyando un juicio que buscaba para ese condado tener la discreción de no certificar los resultados electorales.
Otras reglas nuevas permiten a los miembros de la junta electoral local realizar una “investigación razonable” indefinida antes de certificar los resultados de las elecciones y permitirles acceso ilimitado a los documentos antes de votar para certificar, señala The Guardian.
Entre tanto, una encuesta de The New York Times / Siena College estima que a nivel nacional la candidata demócrata, Kamala Harris se halla todavía dentro del margen de error dos puntos porcentuales sobre Donald Trump (49%-47%), pero en Georgia la cosa se invierte y Trump aventaja a Harris con dos puntos (49%-47%) a sólo un mes de la elección.
En este contexto, a finales de julio y agosto Harris obtuvo ganancias constantes y sin embargo su asenso se ha ido estabilizando, lo que sugieren que Harris consolidó ya su mayor nivel de aceptación en Georgia, sostienen analistas del Times. Pero después de años de dominio republicano en Georgia, el rápido crecimiento y la diversificación de la población ahí contribuyó a la más estrecha de las victorias para el presidente Biden en 2020, y a dos escaños en el Senado para los demócratas a principios de 2021.
Con todo, el subdirector de campaña, Quentin Fulks dijo a propubica en un comunicado que “Durante meses, los republicanos de MAGA en Georgia y en todo el país han estado tratando de sentar las bases para desafiar los resultados electorales cuando pierdan de nuevo en noviembre”. Es decir que han aumentado nuevas tácticas de supresión del voto, además del gerrymandering o la manipulación de las líneas distritales. Pero Fulls señaló que “Algunos extremistas no elegidos no pueden simplemente decidir no contar tu voto”, advirtió el funcionario.
Foto: Lithographic/Adobe Stock