Fentanilo y otras drogas abundan en calles de Los Ángeles

Cada cinco minutos una persona muere por sobredosis en Estados Unidos. Según datos oficiales la mayoría de los casos se deben al consumo de drogas sintéticas como el fentanilo. Aunque el consumo de opioides inició en las zonas rurales entre jóvenes blancos ya se extendió a las grandes ciudades sumando a jóvenes negros, latinos y de otros grupos étnicos. Alejando Maciel recorrió algunas calles de Los Ángeles, California, y nos preparó el siguiente reporte.

En las calles de Los Ángeles Jorge Ávalos, 49 años, se juega literalmente la vida todos los días. Es adicto al fentanilo y sabe que lo puede llevar a la muerte.

“Pues depende dónde lo agarre uno, dónde vaya y lo compre, hay veces que no sabe uno lo que le están vendiendo…”

Jorge trabaja en la construcción y se especializa en demoliciones. Tiene casi una década en el país y no tiene planes de dejar su adicción.

“Dependiendo de cómo lo compre uno, si quiere uno de diez, veinte, 50 dólares…, dependiendo de la economía de uno.”

Jorge es un claro ejemplo de las estadísticas. Según datos oficiales, más de 160 trabajadores de la construcción mueren por sobredosis de fentanilo por cada 100 mil personas. 400 por ciento más que el promedio en otras industrias.

El fentanilo es un opioide sintético que empezó a circular hace más de una década. Desde entonces el consumo sigue aumentando y tiene muy preocupado al jefe de Policía de Los Ángeles, Michel Moore:

“Mi preocupación, no sólo como oficial de policía, sino como padre de familia, es la potencia de esta droga y el apetito que los americanos tienen por los narcóticos…”

Este es un apetito mortal. Hace 12 años solamente se registraron mil 615 muertes por sobredosis de fentanilo. El año pasado murieron al menos 110 mil en todo el país, de acuerdo con el Centro para el Control de Enfermedades, CDC.

Lo más grave es que muchos consumen fentanilo sin saberlo. Compran drogas tradicionales mezcladas con dicho opioide que es 50 veces más potente que la heroína y 100 veces más que la morfina. Así los traficantes disparan sus ventas dice José Magaña, activista en la prevención de adicciones en la organización The Wall/Las Memorias, en el centro de Los Ángeles.

“… Entonces, si uno compra la droga y siente que es más potente van a regresar con él porque tiene la droga buena”

Para disminuir las fatalidades el Condado de Los Ángeles distribuye de manera gratuita el Narcal, un producto que, al revertir la sobredosis está salvando vidas, destaca Magaña.

“Porque si no te afecta directamente, a alguien le va a afectar; a alguien conocido, un amigo, un amigo de alguien…”

A un lado de los grandes edificios del centro de Los Ángeles miles de adictos viven y se drogan en público en el llamado skid row. En esta zona las muertes por sobredosis se dispararon de 13 a 148 en 5 años. El fentanilo fue responsable de 7 de cada diez de los fallecidos, según datos del médico forense del Condado.

La zona es representada en el Concejo de la Ciudad por Kevin de León, quien está agobiado por el tamaño del problema y por la falta de ayuda.

“No he visto nada de acción del Presidente ni de los diputados federales hasta la fecha; no he visto nada de acción y hay mucha gente que se está muriendo en este momento…”

A pesar de los enormes decomisos del año pasado, con drogas suficientes como para acabar con toda la población del país, el fentanilo y otras drogas siguen fluyendo en las calles de la ciudad.

“Todas, activo, aerosoles, marihuana, cpc, ácidos”

José Rodilla es un diseñador gráfico mexicano de 43 años. Desde que tenía 16 consume drogas y a pesar de los riesgos no piensa dejar su adicción. Tiene dinero y es fácil de conseguir lo que quiera.

“En los parques, en la calle, en cualquier crucero, a veces hasta caminando se te cruza cualquier persona y te hace señas y ya sabes tú las señas y las claves de todo…”

Para la Edición Semanaria de Noticiero Latino, desde Los Ángeles, Alejandro Maciel.

Foto: MaciejBledowski/AdobeStock