Arde como nunca el Oeste de Estados Unidos mientras algunos se niegan a evacuar

Aunque los incendios forestales del Occidente estadunidense ocurren todos los años, la influencia del cambio climático es cada vez más evidente, dicen científicos. Se ve reflejada en las olas de calor extremo, anormalmente altas y durante períodos cada vez más prolongados que han contribuido a la intensidad de los incendios este verano, por cierto el más caliente de la historia. Aparejado a esto están las cada vez extremas sequías y la baja humedad en esas zonas del país, lo que propicia la expansión del fuego que ayudado por los fuertes vientos alcanza y arrasa todo a su paso.

De la redacción

Mientras los intensos incendios forestales continuaban ardiendo en partes occidentales de Estados Unidos hasta el domingo por la noche, provocando miles de órdenes de evacuaciones en Utah y en el norte de California, los bomberos de Oregón anunciaron que hasta ayer habían contenido por completo lo que en un momento fue el mayor incendio forestal del país este año.

De acuerdo con la agencia estatal, Cal Fire, en cuatro condados de la parte norte de California arde el incendio de Dixie, que ha consumido ya más de 550 mil acres; es decir, más de dos veces el tamaño de Los Ángeles, convirtiéndose en el incendio más grande registrado en Estados Unidos. Hasta el domingo por la mañana estaba contenido apenas en un 31 por ciento. Se dice que Dixie relegó al segundo lugar el incendio Bootleg Fire, en Oregón, que las autoridades estimaron ayer estaba contenido al 100 por ciento, pero tras devastar más de 400 mil acres desde principios de julio.

En tanto, un incendio forestal en los alrededores de Fresno provocó que se emitiera una orden de evacuación el domingo por la tarde, mientras dicho incendio consumió 40 acres y continuaba ardiendo hasta altas horas de la noche, reporta The Fresno Bee.

Se desconocía el número de estructuras amenazadas en la comunidad de Squaw Valley, en la zona rural del condado de Fresno a unas 30 millas al este de la ciudad, pero el avance se había detenido, dijo el jefe del Batallón de Bomberos de CalFire, Shawn Hogan. No hay estructuras destruidas, y hasta ayer por la noche afirmó que era probable que todo siguiera manteniéndose así. La orden de evacuación obligatoria para las áreas de MarLar Lane y Silver Lane se emitió a media tarde y permaneció vigente a las 8 p.m. del domingo.

Por su parte, The New York Yimes señala que en el este de Utah, el rápido incendio Parleys Canyon Fire, que inició el sábado por la tarde, “forzó rápidamente la evacuación de al menos 6 mil viviendas”. El gobernador, Spencer Cox habría advertido que el domingo sería “otro día de fuego difícil”, ya que el incendio “había carbonizado al menos mil 500 acres al este de Salt Lake City y estaba contenido en un 0 por ciento”. Algunos de sus bomberos regresaban exhaustos de asistir en otros incendios forestales de otros estados, para sumarse de inmediato al Parleys Canyon.

FEMA, la Agencia Federal para el Manejo de Emergencias dijo ayer que había aceptado una solicitud de funcionarios de Utah para ayudarlos a cubrir el costo del comabte al referido incendio, mientras la Cruz Roja de Utah afirmó que “25 personas se han alojado en un refugio que la organización había establecido en una escuela secundaria en Park City el sábado por la noche.

En tanto, el alguacil del condado de Summit, que incluye a Parleys Canyon, dijo en un Twitter recogido por la fuente que “el sábado por la noche algunos residentes se habían negado a evacuar”, y que su decisión “estaba poniendo en peligro a los bomberos y otros trabajadores de emergencia’.

Hasta ayer por la noche Dixie había destruido mil 120 estructuras y amenazaba otros 14 mil 838 edificios, habría dicho Cal Fire, y sostuvo que la causa del incendio aún estaba bajo investigación. Durante más de un mes, los bomberos han estado luchando para sofocar las llamas del incendio Dixie, que a principios de agosto había destruído la ciudad de Greenville, California.

Se pronosticaban tormentas eléctricas el domingo para el área donde ardía el incendio Dixie, un desarrollo que podría eventualmente obstaculizar los esfuerzos de extinción de incendios de los servicios de emergencia si hay rayos.

La sequía en la región, donde las temperaturas podrían alcanzar más de los 100 grados Fahrenheit, con menos del 18 por ciento de humedad, “dejan al área particularmente vulnerable a los incendios forestales,” afirman las autoridades■