Alertan sobre la peligrosa calidad del aire que se respira en el Valle de San Joaquín
Una alerta que operaba originalmente hasta el lunes, principalmente para la región comprendida entre Stockton y Bakersfield, California, con los incendios Windy Fire y KNP Complex Fire arrasando con furor la zona, avisa sobre los “altos niveles de partículas finas en el aire (AQI), de menos de 2.5 micrones de ancho que pueden causar serios problemas de salud y agravar las enfermedades pulmonares”.
Los valores de AQI iguales o inferiores a 100 generalmente se consideran satisfactorios. Cuando están por encima de 100, la calidad del aire no es saludable. El AQI se divide en seis categorías que corresponden a un nivel diferente de preocupación por la salud. En esta gráfica, a través de los colores específicos se puede determinar rápidamente si la calidad del aire está alcanzando niveles insalubres en su comunidad.
Hoy, el Servicio Meteorológico Nacional en Hanford “no predijo un alivio inmediato del aire tóxico en su pronóstico del lunes, ofreciendo sólo como posibilidad de mejora que “un frente de baja presión se mueva hacia el área sur de la región, con lluvias ligeras a partir del martes”. Pero el pronóstico de la agencia federal señala que “la pésima calidad del aire en el Valle de San Joaquín permanecerá en alerta hasta este jueves”.
La agencia insta a la población de la zona a “permanecer en ambientes con aire acondicionado y filtrados, con las ventanas cerradas”, y también advierte que “las máscaras cubre bocas de tela y papel comunes que se usan como precaución contra las infecciones por COVID-19 podrían no ser suficientes contra el humo de los incendios forestales”. Por eso recomienda a aquellos que tienen que ir a trabajar en exteriores, como los trabajadores esenciales por ejemplo, que “probablemente necesitarían máscaras de calidad N95”, como las que usa el personal médico en hospitales.
Y es que el incendio del complejo KNP, que ha ardido durante casi cuatro semanas en la cordillera de Sierra Nevada en el este del condado de Tulare, avanzó aproximadamente 5 mil acres durante la noche, “expandiéndose a casi 68 mil acres el lunes por la mañana”, reporta por su parte el sistema de información de incidentes, InciWeb, del Servicio Forestal de Estados Unidos. Agrega que “dentro del Parque Nacional Sequoia y Kings Canyon, así como del Bosque Nacional Sequoia, el incendio abarcó 67 mil 708 acres, con una contención estimada en alrededor del 11 por ciento”. Eso es un cambio con respecto al informe de situación del domingo, acerca del avance de “62 mil 761 acres y con un 20% de contención”.
Al respecto, la agencia que monitorea la calidad del aire emitió “nuevas órdenes de evacuación el domingo por la noche para los residentes del área de Mineral King, Gateway, hasta la entrada del parque, incluido Sycamore Drive”. Pero a medida que el incendio del complejo KNP, junto con el Windy Fire -que arden más al sur, en el condado de Tulare-, está bombeando humo al aire sobre el Valle de San Joaquín, “este volumen de humo, hollín fino y cenizas que se desplaza hacia el oeste, hizo que los cielos de Fresno y de la región se volvieran de un color gris anaranjado fangoso, y provocaran una advertencia continua sobre la mala calidad del aire para los residentes del Valle”.
De esta suerte, Noticiero Latino de Radio Bilingüe preparó el siguiente Boletinazo de Alerta para los habitantes del Valle de San Joaquín, o de ciudades como Fresno y sus alrededores, con algunas pertinentes recomendaciones para mantenerse a salvo de la contaminación del aire que se respira en sus comunidades:
Debido a los incendios que arrasan los bosques de la zona serrana, las ciudades del Valle de San Joaquín están en Alerta Roja por su Índice de Calidad del Aire, que actualmente se ubica entre 150 y 200.
Es insalubre y peligrosa para todos. Esto quiere decir que es difícil respirar el aire, que está lleno de nocivas partículas de humo que pueden agravar problemas cardiacos, causar daños pulmonares o embolias e incluso exponer a sustancias cancerígenas.
Las personas que padezcan enfermedades pulmonares o del corazón, los pacientes de diabetes o asma, los ancianos, los niños y los adolescentes.
Hay que evitar actividades intensas al aire libre, tales como correr, hacer ejercicios, caminar o trabajar duro.
Mover las actividades físicas a espacios interiores o cancelarlas.
Reanudar las actividades al aire libre cuando mejore la calidad del aire
Mantener puertas y ventanas cerradas.
Usar abanicos y aire condicionados con filtro de alta eficiencia para refrescar la habitación.
Usar purificadores de aire portátiles.