Todo lo que desee saber sobre braceros contratados, en nuevo sitio web.

Alissa EscarcevOY CONTRATANDO
Coordinadora de Comunicaciones, Proyecto de Justicia en el Reclutamiento
Centro de los Derechos del Migrante, Inc.
3 de oct. de 14

Blog: Contratados.org, para Radio Bilingüe

A Martín Dávila Venegas se le hace un poco difícil usar una computadora. Sin embargo, durante varias semanas ha estado entrando a internet cada día con el apoyo de sus hijos, para practicar. “Yo nunca había usado una computadora,” dijo. “Al principio no entendía los símbolos y pensaba ‘¿de qué se tratan?’, pero ya empecé a agarrarle el hilito y voy mejorando.”

Dávila vive en Guadalupe, Zacatecas, una comunidad donde muchas personas migran a los Estados Unidos. Entre el 2002 y el 2007 Dávila fue una de ellas cuando viajó a los estados de Colorado, New Jersey, Nueva York, Delaware y Pennsylvania como trabajador temporal con visa H-2B. Fue uno de los más de 100,000 trabajadores que cada año viajan a los Estados Unidos para trabajar durante unos cuantos meses con visas H-2A (para trabajos agrícolas) y H-2B (para trabajos no agrícolas). Trabajó en la jardinería y luego en una feria ambulante.

Ferias 2El primer trabajo que tuvo, dijo Dávila, “estuvo muy bien—fue un trabajo muy especial. Sí se nos pagaba bien, nos trataban bien, nos instalaban en buenos departamentos. Todo estaba muy bien controlado.”

En el segundo trabajo “fue todo lo contrario.” La experiencia empezó enZacatecas, donde una oficina de empleo lo enlazó con un reclutador en Monterrey. Dávila pidió un préstamo para pagar el pasaporte, la visa, el transporte a Monterrey y a los Estados Unidos, y los gastos que tendría su familia antes de recibir su primer pago.

“Empezó todo lo negativo cuando estábamos en Monterrey,” dijo Dávila. “Allí tuvimos contacto directo con el reclutador y nos dijo a dónde íbamos a trabajar. En Zacatecas nos habían prometido un salario de $8 dólares por hora, pero en Monterrey nos dijeron que sería un sueldo fijo de $275 por semana. No pudimos hacer nada porque habíamos pedido dinero prestado y no teníamos otra opción.” Las condiciones en el trabajo resultaron aún peores de las que le describieron en Monterrey. Intentaron confiscar su pasaporte, no le dieron contrato y le pagaron $255 por más de ochenta horas de trabajo a la semana—mucho menos del sueldo mínimo por hora establecido por ley. “Teníamos que subir a alturas extremas sin protección y no teníamos garantía si nos accidentábamos,” recordó Dávila. Después de ocho semanas, Dávila y varios de sus colegas dejaron el trabajo y regresaron a México.

Contratados Press Shot screenshot.jpgDávila ha estado aprendiendo a usar la computadora para poder compartir estas experiencias con otros trabajadores temporales a través de una nueva página web: www.Contratados.org. Esta página es una iniciativa del Centro de los Derechos del Migrante, Inc. (CDM), una organización binacional que defiende los derechos de las y los trabajadores migrantes. Contratados busca transparentar el sistema de reclutamiento laboral internacional y darle a las y los migrantes los recursos que necesitan para tomar decisiones informadas y defender sus derechos.

Las experiencias de Dávila son comunes entre las personas que se van “de contratados” con visas temporales a los Estados Unidos. El 47% de los trabajadores H-2 encuestados por el CDM para el estudioRevelando el Reclutamiento pidieron dinero prestado para cubrir sus gastos y costos de pre-empleo. Al 52% no se les mostró un contrato explicando las condiciones de trabajo y sus reclutadores frecuentemente les hicieron falsas promesas sobre las condiciones de empleo. Como Dávila, muchos trabajadores han tenido que hacer decisiones claves en un vacío de información confiable y debido a las deudas que adquieren, terminan en situaciones donde se sienten obligados a continuar trabajando aún en condiciones de explotación o abuso.

Contratados Abuelita Buzz BuzzContratados permite que los mismos trabajadores temporales llenen los vacíos en la información que necesitan para protegerse y defenderse. A través de una página interactiva, los trabajadores pueden escribir reseñas sobre las personas y agencias que los reclutan y sobre las empresas donde trabajan. Con estas reseñas se creará un marco del sistema de trabajo temporal desde la perspectiva de las y los trabajadores que dará a las personas que quieren ir a trabajar en los Estados Unidos una idea más precisa de las condiciones que pueden enfrentar.

“Yo creo en la democratización verdadera de la tecnología,” explica Sasha Costanza-Chock, Profesor Asistente de Medios Cívicos en la Massachusetts Institute of Technology y co-fundador de Research Action Design (RAD). El RAD colaboró con el CDM y el Comité de Defensa del Migrante—grupo de trabajadores migrantes organizados del cual Dávila es uno de los líderes—para diseñar y crear Contratados.org. Costanza-Chock se dedica a diseñar medios digitales en conjunto con grupos organizados, incluyendo a varios grupos de migrantes. “Desafortunadamente en nuestra sociedad la gran mayoría del desarrollo tecnológico y de la producción de medios está orientada a un grupo relativamente pequeño de personas adineradas que tienen ingresos disponibles,” continuó. “Yo pienso que los programadores, diseñadores y creadores de medios deberían de enfocar más su tiempo y energía en las personas trabajadoras.”

La meta principal de la página es ser accesible para los trabajadores. Hay guías claras para dejar reseñas y se puede acceder a la página desde una computadora personal, un cibercafé o a través de una línea telefónica. “El funcionamiento del sitio me gustó porque lo que vi desde el principio es que es muy práctico,” dijo Dávila. “Se me hizo bien accesible, cualquiera lo puede usar. Además, podemos sacar muchísima información sobre lo que nos interesa saber sobre el reclutamiento, reclutadores, empleadores y sobre los mismos trabajos.”

Servicio de ReclutamientoDávila sabía poco de sus derechos antes de ir a trabajar a los Estados Unidos. Empezó a aprender sobre ellos cuando el CDM hizo un taller en Guadalupe en el 2006 y desde entonces se ha involucrado ampliamente en la defensa de los derechos de los trabajadores migrantes. Ha viajado a la Ciudad de México, a Nueva York y a Washington, DC para hablar con trabajadores, estudiantes, defensores y legisladores sobre sus experiencias. También ha trabajado a nivel local en Guadalupe para informar a sus vecinos sobre los derechos y ha logrado detener a varios fraudes en el reclutamiento. “Ya tenemos la experiencia y no vamos a caer en las garras del engaño,” explicó.

Para la creación de materiales cautivadores sobre los derechos de los trabajadores disponibles en la página de Contratados.org, el CDM también colaboró con Studio REV-, una organización de arte sin fines de lucro. Juntos desarrollaron cómics y audio novelas en los cuales personajes coloridos hablan con trabajadores ficticios sobre sus derechos. “Nuestra meta es despertar la imaginación pública a través de experiencias digitales, aplicaciones, talleres, herramientas y trabajo organizativo de base,” dijo Marisa Jahn, artista y fundadora de REV-. En los cómics y las novelas, “un pulmón jadeante y un par de manos dan consejos a su dueño sobre como evitar daño por pesticidas. Una estufa y un camión avisan a su dueño que los trabajadores con visa H-2A deben recibir reembolsos por los gastos de vivienda y transporte.”

Contratados Fraude Soccer“Es una herramienta que es súper necesaria, porque de allí podemos sacar información de los reclutadores y empleadores, escribir una reseña, podemos buscar nuestros derechos que tenemos como seres humanos en cualquier parte del mundo y en los Estados Unidos en particular. Eso es fabuloso para nuestra protección” dijo Dávila. “Yo siempre he dicho, quien sabe si yo vuelvo a ir, pero si hay alguien se va de mi casa o de mi barrio o qué sé yo, estoy aquí—con el apoyo de Contratados.org—para dar asesoría para que no sufran todo lo que yo pasé.”

Para aprender más y participar, visite www.Contratados.org. Para participar por teléfono marque al 55-4741-1292 desde México o al 1-888-451-2908 desde los EEUU.

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