Sequía que azota el suroeste de EE UU, la peor en 1,200 años… en parte por el cambio climático

Sequía en los cultivos de maíz. Foto: dreamstime.com.

De la redacción

La sequía que ha azotado al Oeste de Estados Unidos ha propiciado también los pavorosos y destructivos incendios forestales de esa región, con particular énfasis en el suroeste, como hemos venido reportando en este espacio informativo durante un buen tiempo.

Este lunes Park Williams, el científico climático que dirigió un análisis utilizando datos obtenidos de la observación de los anillos de los árboles para medir la sequía, dice que ésta “comenzó en el año 2000 y redujo los suministros de agua, lo que perjudicó a los agricultores y ganaderos”, según reporta The New York Times.

La mega-sequía en el suroeste de Estados Unidos se ha vuelto tan severa que actualmente se han registrado “las dos décadas más secas en la región en al menos mil 200 años… y el cambio climático es en gran parte responsable”.

La sequía, que comenzó en el año 2000 y que redujo los suministros de agua, devastó a agricultores y ganaderos y ayudó a alimentar incendios forestales en toda la región, “había sido considerada previamente como la peor en 500 años, según los investigadores que cita la fuente.

Sin embargo, acota, “las condiciones excepcionales en el verano de 2021, cuando aproximadamente dos tercios del oeste estaban en una sequía extrema, realmente lo llevaron al límite”, afirma el científico Williams, basado en la investigación que dirigió durante el periodo de 2000 a 2021.

No obstante, el Dr. Williams sostiene que de todos modos habría habido una sequía independientemente del cambio climático. “Pero su gravedad habría sido sólo alrededor del 60 por ciento” de lo que se ha registrado en los últimos años.

Por su parte, la climatóloga de la Universidad de Michigan y quien no participó en la referida investigación, Julie Cole señaló a la fuente que si bien los hallazgos no fueron sorprendentes, “el estudio simplemente deja en claro cuán inusuales son las condiciones actuales”.

La Dra. Cole añade que el estudio también confirma que la temperatura tiene un papel más relevante que la precipitación fluvial en la aparición de sequías excepcionales: “Las cantidades de precipitación pueden subir y bajar con el tiempo y pueden variar regionalmente, y señaló también que “a medida que las actividades humanas continúan arrojando gases de efecto invernadero a la atmósfera, las temperaturas aumentan en general”.

El Dr. Williams sostiene que “este año podría terminar siendo húmedo”, y sin embargo señala que los dados arrojados por la investigación “están cada vez más inclinados a que este año sea un año anormalmente seco”.

Samantha Stevenson, modeladora climática de la Universidad de California en Santa Bárbara, que tampoco participó en el estudio, dijo a la fuente que “la investigación muestra lo mismo que muestran las proyecciones: que el suroeste, como otras partes del mundo, se está volviendo cada vez más seco”.

Con todo, la científica afirmó que en todas partes se está volviendo cada vez más árido, “Pero en el oeste de Estados Unidos eso es seguro”, lo que coincide con otros de sus colegas al afirmar que eso se debe principalmente al calentamiento de la superficie terrestre, “con alguna contribución también de los cambios en las precipitaciones”•

What Can We Learn From How the State Responded to the Last Major Drought?