Rubén Gallego, primer senador federal de origen mexicano

El representante demócrata Rubén Gallego ganó el escaño del Senado federal por Arizona. La candidata opositora, la republicana Kari Lake, una presentadora de noticias que todavía niega el triunfo de Joe Biden en 2020, fue derrotada por Gallego.

Las elecciones traen consecuencias, y en el nivel nacional las del 5 de noviembre le cedieron el Senado a los republicanos (52 a 47), pero Gallego se eleva hoy como el primer senador de origen mexicano en el cámara alta, ganando un estado campo de batalla mayoritariamente republicano, que votó por Trump y que sin embargo no voto por todos los republicanos de la boleta.

Los votantes de Arizona han rechazado a Trump y a sus candidatos favoritos en todas las elecciones estatales desde 2016, cuando Arizona comenzaba a teñirse de morado.

En varios otros estados el electorado también se inclinó por Trump en la boleta, pero votó demócrata por otros puestos de elección popular. No obstante, Trump se llevó todos los estados cambiantes o campo de batlla y el voto popular.

Gallego proviene de una familia de clase trabajadora en Chicago, y se había mantenido como congresista federal durante cuatro mandatos. Desde que era adolescente, dice, trabajó para mantener a su familia de escasos recursos. Luego asistió a la Universidad de Harvard y posteriormente luchó en la guerra de Irak como infante de marina, antes de unirse a la política de Washington.

Hoy Gallego se convierte en el primer senador latino de Arizona, ocupando el puesto que dejó vacante la exsenadora independiente y exdemócrata, Kyrsten Sinema.

Tras conocerse el cómputo final este lunes, precisamente el Día de los Veteranos de guerra, al rendir su discurso de aceptación Gallego sostuvo una conferencia de prensa en la que con lágrimas en los ojos, según se pudo apreciar por la televisión, se refirió a sus raíces humildes. Y dedicó su victoria a la infancia, que vive en situaciones similares a las que él mismo tuvo que pasar. “Para los niños que duermen en el suelo, soñando con un mejor Estados Unidos y por un futuro mejor, esta victoria es para ustedes”, dijo.

Sin embargo, el Partido Republicano consiguió la mayoría del Senado arrebatándole esa importante cámara legislativa  a los demócratas, que la mantuvieron durante cuatro años en su poder.

Vale aclarar que Arizona estuvo durante varias décadas sin tener un representante demócrata en el Senado. Pero a partir de 2016, justo tras el primer arribo de Trump a la Casa Blanca, los votantes de Arizona han venido eligiendo demócratas en cuatro elecciones sucesivas.

Esto ha permitido que Arizona transitara de un fiable estado republicano, bastión de conservadores, a un campo de batalla competitivo, eligiendo a Kyrsten Sinema en 2018, Mark Kelly en una elección especial en 2020, y luego ser elegido de nuevo en 2022.

La victoria de Gallego es quizás la más notable desde un punto de vista ideológico, porque “Durante años, fue un progresista franco, y hubo preguntas tempranas sobre si se vería demasiado liberal para ser elegido en todo el estado”, reporta The New York Times.

Ya en 2023 Gallego había lanzado un reto por el escaño de Sinema, luego que ella abandonara las filas demócratas y votara con los republicanos para obstaculizar la agenda de Biden-Harris.

Y cuando Sinema anunció que no buscaría la reelección, Gallego enderezó su campaña consolidando el apoyo de los demócratas y de algunos republicanos.