Retoma vuelo tradición oaxaqueña, ‘Noche de Rábano’ en Los Ángeles
José Luís Franco y su familia. Ganó el 1er lugar. Foto. Rubén Tapia.
La tradición oaxaqueña de esculpir rábanos y convertirlos en obras de arte, interrumpida durante la pandemia, se retomó esta semana en Los Ángeles, California. En un popular mercado de comidas se reunieron centenares de familias no sólo para esculpir los rábanos, sino también para disfrutar la música de banda y los coloridos bailables de dicho estado mexicano, de mayoría indígena. Esta celebración, nacida durante la época colonial es otra muestra de cómo la cultura oaxaqueña florece donde se asientan sus inmigrantes. Rubén Tapia estuvo presente y entrega su reporte desde el sur de Los Ángeles.
Patricia Alcaraz deleita al público acompañada por la popular banda Maqueos, formada por muchos hijos e hijas de oaxaqueños nacidos en Los Ángeles.
Mientras, a un lado, decenas de personas se esmeran en esculpir los rábanos con un cuchillo, delgados palillos, hojas de tamal y ramas vedes. Hace dos años que Fernando López llegó de Oaxaca y nunca había participado; aún así, pudo esculpir la figura de un danzante.
“Amo a mi cultura. Yo creo que no la había valorado tanto como cuando llegué acá y participe en mi primera Guelaguetza”
Pero no solamente participan oaxaqueños. En una mesa contigua cinco amigos, dos de origen mexicano, de Morelos y Michoacán, una joven de raíz ruso -italiana y dos filipinos están dando forma a dos figuras para festejar la amistad.
Antes de iniciar la competencia José Morales, un artista comunitario de este mosaico, los orienta sobre cómo esculpir los rábanos.
“Cómo cortar una figura simple y sencilla… Pero los cortes más elementales, y despertar un poquito la creatividad que todo oaxaqueño tiene“
José dice que esta tradición inicio en Oaxaca hace más de 200 años durante una Navidad.
“Los hortelanos de Trinidad de las Huertas llevaban sus productos a vender a Oaxaca antes del 24, de la noche del 24. Pero entonces notaron que sus ventas habían bajado porque la gente estaba más comprando algunas otras cosas, y a uno de ellos se le ocurrió empezar a crear estas figuras”
Los demás vendedores siguieron su ejemplo llenando el mercado con estas figuras de rábanos.
En este evento esculpieron 68 piezas, incluidas figuras humanas, mitológicas, un Nacimiento, vírgenes, animales y otras figuras. Tres jueces toman apuntes de los trabajos, como la líder zapoteca Odilia Romero.
“Ese es uno de los eventos que nos une, que muestra nuestra creatividad, nuestra contribución a la cultura angelina y de Oaxacalifornia”
“Llego la hora de seleccionar los primero 3 lugares…”, dicen los conductores del programa.
El primer lugar fue la figura de un vendedor de frutas, esculpida por José Luís Franco, del estado de México, con la ayuda de su hija y esposa. Es la primera vez que participa y lo hizo en honor a su señor padre.
“Porque mi papá tenía ese trabajo cuando vino acá. El empezó vendiendo un carrito de frutas y luego ya puso su negocio”
El segundo premio fue para Amada López, una oaxaqueña y veterana ganadora de la Noche de Rábanos. Sus hijos le ayudaron a esculpir la fachada de la iglesia de su pueblo en San Juan Teitipac, en los Valles Centrales.
“Pues a nos gusta la nuestra cultura y pues siempre queremos como representar algo de mi…“
El tercer lugar fue para la figura de un animal mitológico.
La celebración de la Noche de Rábano en Los Ángeles inició hace más de dos décadas, por la Comunidad Tlacolulense en Los Ángeles (COTLA).
En esta ocasión fue organizada por varias agrupaciones, y recibieron el reconocimiento de varios políticos locales. Juan Antonio es uno de los coordinadores.
“No es un evento personal, es un evento que habla de todos los oaxaqueños, de todo México”
Con un baile colectivo animado por la Danza de los Diablos, una tradición afro mestiza de la zona, finalizó la celebración la Noche de Rábanos, con la promesa de regresar en diciembre del próximo año.
Para la Edición Semanaria de Noticiero Latino, desde el sur de Los Ángeles, Rubén Tapia.
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