Políticas públicas oficiales e iniciativas ciudadanas para salvar al Colorado
Marco Vinicio González
El cambio climático agudizó una severa sequía que se prolonga por más de dos décadas y a consecuencia el río Colorado se seca. Antes poderoso caudal de agua, que en los últimos 100 años ha venido saciando la sed de millones de habitantes a través de siete estados y una parte del norte de México, la cuenca abastece los campos agrícolas y genera energía eléctrica.
Sin embargo, su volumen muestra hoy niveles de agua históricamente bajos. El río atraviesa una crisis existencial que pide a gritos atenderla, es una emergencia ambiental.
Línea Abierta abordó el tema y señaló, como comentamos antes, que la Ley federal de Reducción de la Inflación asignó cuatro mil millones de dólares en proyectos de conservación del agua para el Colorado.
Samuel Orozco, Director de Noticias de Radio Bilingüe señaló que la Ley del Río, pactada hace más de 100 años y que en 2022 se reconsideró con un nuevo tratado temporal para establecer nuevas cuotas de agua a los siete estados de la cuenca, vence en 2026 y tiene que buscarse un nuevo acuerdo, presumiblemente de largo plazo.
Invitado de Línea Abierta, el Defensor del Medio Ambiente, Política de Transporte Limpio y Energía Limpia de Colorado, de la organización GreenLatinos en Gunnison, Colorado, Juan Roberto Madrid contestó inquietudes de los radioescuchas.
Advirtió sin embargo que no quisiera asustar con la imagen recién pintada del río Colorado. El consumo de agua del Coloradopara las ciudades, dijo, anda alrededor del 20 por ciento del total que se extrae del río. Y el 80% restante se destina a la agricultura.
Con el nuevo pacto y la ley, sostuvo, “no van a quedarse sin agua las ciudades… lo que preocupa es la devastación que la sequía va a traer al río Colorado con el cambio climático en la agricultura… como individuos es mucho más que lo podemos hacer que el gobierno federal”. Y citó estudios que demuestran que la tercera parte de la comida que se produce en el país se desperdicia, se tira.
Orozco agregó por su parte que “más que la agricultura son los ranchos ganaderos los que se llevan la tajada del león… para regar sus campos de alfalfa para el forraje del ganado… un cultivo muy sediento”.
Madrid coincide en que es la industria ganadera la que tiene los derechos del agua: “los Imperial Irrigation District son los que usan la mayoría del agua en California”, el estado que por cierto tiene la mayor cuota de agua del Colorado. Y expone el tema como un problema de justicia ambiental.
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En este contexto, conviene saber de dónde viene la carne que se está consumiendo, si de la gran industria cárnica o de un pequeño productor, de Estados Unidos, de México u otros países, y de las condiciones ambientales de de donde proviene esa carne, y que procesos se están usando para la producción de esa carne, etcétera.
Qué esperar del 2026, cuando estados, gobiernos y organizaciones civiles vuelven a reunirse en busca de nuevos planes hacia el futuro para el río Colorado, plantea Orozco.
Jorge Figueroa, Miembro del Círculo Hermanas del Río Colorado en Denver, también invitado de Línea Abierta, propuso un enfoque dirigido más bien a las potencialidades de la sociedad civil. “Con el poder que tenemos, sin depender de esas conversaciones” entre las referidas partes. Y estableció una lista de acciones que se pueden tomar:
1.- Tenemos que conectarnos con nuestros ríos… hasta donde conocemos, los ríos son el origen de la vida, en el universo. Y votar por políticos que crean en el cambio climático, y que tengan fondos y políticas públicas… los ríos sn como los planes 401k de ahorros de jubilación para el futuro de nosotros como humanidad…
2.- Debemos tener una voz en la mesa donde están tomando las decisiones el gobierno y los estados… nuestros miembros de la comunidad, informando al gobierno que está tomando esas decisiones
3.-En GreenLatinos tenemos con otras 22 organizaciones Latino Climate Justice Framework/Marco de Justicia Climática Latina, para informar, abogar, y diseñar estrategias para llegar a las Juntas Administradoras del Agua. Y para que piensen cómo nos impactan sus decisiones.
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