Pide el tesoro un segundo paquete de ayuda para trabajadores desempleados por coronavirus

De la redacción

La idea del Departamento del Tesoro y los líderes del Senado es respaldar el programa de préstamos para pequeñas empresas, de 349 mil millones de dólares contenido en el paquete de Ley de Rescate de Coronavirus, de 2.3 millones de millones promulgado a fines de marzo.

Y es que tanto los bancos como la Administración de Pequeños Negocios “se han visto abrumados” por las solicitudes de desempleo “desde que el programa comenzó a funcionar el viernes”, y el presidente Trump, así como Marco Rubio, el senador republicano de La Florida que es autor del programa buscan más fondos.

Por su parte, el senador republicano de Kentucky y líder de la mayoría en el Senado, Mitch McConnell declaró a la fuente que el martes trabajaría con el secretario del Tesoro, Steven Mnuchin y el líder demócrata de la minoría en el Senado, el neoyorquino Charles Schumer a la espera de poder aprobar por unanimidad más fondos para el el referido segundo “Programa de Protección de Cheques”, cuyo consentimiento o voto de voz se realizaría durante la próxima sesión del Senado programada para el jueves, a fin de evitar que muchas empresas cierren.

“El programa de pequeñas empresas se ha incrementado más rápidamente que otros elementos de la ley de rescate, incluido el seguro de desempleo y los pagos a particulares, pero la demanda aún ha superado las expectativas”, dice el Post.

De acuerdo con el borrador del programa serán elegibles para préstamos de hasta 10 millones de dólares las empresas con menos de 500 empleados. No tendrán que devolver los préstamos si los dueños de los negocios cumplen con ciertas condiciones, incluido “el uso del 75 por ciento del dinero para retener o volver a contratar a los empleados”. Las empresas pueden recibir un adelanto del préstamo de 10 dólares que no tiene que pagar, dijo la Administración de Pequeños Negocios, SBA.

Hasta el momento 178 mil solicitudes de firmas han buscado préstamos por 32 mil 900 millones de dólares mientras las compañías claman por ser elegibles al programa de la SBA, de 349 mil millones, que había recibido hasta ayer el Banco de America.

Por su parte Wells Fargo no había aceptado solicitudes hasta el sábado, y para el lunes por la mañana dijo que “había alcanzado el límite de 10 mil millones de dólares establecido para préstamos bajo el programa. Y para hacer frente a la aplastante demanda, “la Reserva Federal lanzó un sistema para que los bancos descarguen estos activos y puedan originar más préstamos”.

De acuerdo con la fuente, los demócratas y los republicanos han comentado en los últimos días que “el programa de 349 mil millones probablemente debería ampliarse, pero los demócratas también han pedido otras extensiones, como más beneficios de seguro de desempleo para los trabajadores despedidos”.
Schumer y otros senadores demócratas anunciaron el martes un esfuerzo para obtener un pago de riesgos equivalente a 25 mil dólares anuales para los trabajadores que se han visto obligados a permanecer en el trabajo durante la pandemia, “y podrían tratar de utilizar la demanda del Partido Republicano para el financiamiento de pequeñas empresas como palanca para incluirlo en el próximo proyecto de ley de rescate”.

“Todo lo que voy a decir es que esta es una de nuestras más altas prioridades” para el próximo proyecto de ley, dijo Schumer a los periodistas, refiriéndose a la adición de pago de riesgos.

Mnuchin dijo hoy que “apoya su solicitud de más dinero para las pequeñas empresas” y tras la aprobación del Senado, “la Cámara debería actuar rápidamente para hacer lo mismo”.

Se supone que este programa alienta a las pequeñas empresas a dejar de despedir empleados, luego de que 10 millones de trabajadores solicitaron reclamos de desempleo a fines del mes pasado. Se espera que la tasa de desempleo aumente mucho más del 10 por ciento esta primavera, y podría permanecer allí hasta el próximo año.

Los funcionarios de la Casa Blanca han dicho que quieren ayudar a promulgar políticas que conduzcan a un fuerte repunte económico este año, pero los economistas han pronosticado que es poco probable que ocurra■