México vive un día histórico: tiene su primera presidenta
Tras la toma de protesta de la Dra. Claudia Sheinbaum como la primera presidenta de México, se traslada al Zócalo de la capital del país a saludar por primera vez a las decenes de miles de mexicano ahí reunidos, desde su nueva investidura, alzando los brazos al cielo en señal de haber llegado. Foto: Presidencia de la República Mexicana.
La Dra. Claudia Sheinbaum Pardo se convirtió en la primera mujer en gobernar México después de que solamente militares y civiles del sexo opuesto ocuparan la presidencia en los dos siglos de historia del país. Tras asumir el cargo y ante decenas de miles de personas, la científica, ambientalista y política de izquierda que llega al poder con el mayor número de votos y una mayoría en ambas cámaras del Congreso, recibió el simbólico bastón por parte de algunos grupos indígenas y afromexicanos. Con detalles, de esta histórica celebración nos reporta Citlalli Sáenz, desde la Ciudad de México.
“Por primera vez llegamos las mujeres a conducir los destinos de nuestra hermosa nación. Y digo llegamos, porque no llego sola, llegamos todas”
Esto fue una parte central del discurso de Claudia Sheinbaum durante una sesión conjunta de ambas cámaras del Congreso de la nación en el Palacio Legislativo de San Lázaro, donde tomó protesta como la primera presidenta en 503 años de historia del territorio mexicano. Recibió la banda presidencial de manos de una emblemática y pionera mujer de izquierda, Ifigenia Martínez, presidenta del Congreso de la Unión, quien pese a estar muy delicada de salud encabezó la ceremonia de transmisión del poder ejecutivo.
Ante el expresidente Andrés Manuel López Obrador y los miembros del Congreso e invitados especiales, desde ministros, funcionarios, mandatarios y representantes de 105 países, Sheinbaum Pardo, en su primer discurso, prometió respetar las libertades y gobernar para todos.
“Gobernaré para todos y para todas, y tengan la certeza de que pondré mi conocimiento, mi fuerza, mi historia y vida misma al servicio del pueblo y de la patria; tengo la certeza de que consolidaremos juntas y juntos un México cada día más próspero, libre y soberano”
El sello de este cambio de gobierno fue marcado por las mujeres, ya que desde que fue recibida por la comitiva en el Congreso hubo solo mujeres, al asumir el cargo también se convirtió en la comandante suprema de las Fuerzas Armadas.
Más tarde en el zócalo, la plaza principal del país y corazón del antigua Tenochtitlan, repleto de mexicanos y mexicanas Claudia Sheimbaum recibió el bastón de mando de representantes de 70 pueblos indígenas, llevaron la milpa al zócalo, colocaron una ofrenda e hicieron una limpia con copal y hierbas para la protección de la presidencia. Todas las autoridades indígenas que la acompañaron en este acto eran mujeres.
Entre olor a copal y palo santo con el sonido del caracol que es el instrumento de aliento más antiguo, usado en los rituales indígenas.
Virginia, una líder indígena, habla sobre lo que significa el bastón de mando para los pueblos indígenas.
“Representa el poder político y espiritual de nuestras raíces, Dios padre y madre, gracias por este día. Gracias porque una mujer por primera vez está aquí con nosotros. A la lucha de las mujeres finalmente se le hace justicia”
Pidieron a los abuelos y abuelas dotar de su sabiduría a la Presidenta, y que le den fuerza para llevar a efecto su mandato; por lo que los pueblos del ‘México profundo’ entregaron su confianza y esperanza en la nueva mandataria.
Virginia pidió fuerza a nuestros ancestros para que Sheinbaum lograra que los pueblos indígenas tengan un lugar justo y digno como lo manda la constitución.
Tras esta ceremonia, la presidenta de México remató diciendo que entregará buenas cuentas y al pueblo que no les iba a fallar.
“Me comprometo con ustedes, a no mentir, a no robar y nunca traicionar al pueblo de México, y a seguir haciendo historia”
Para la Edición Semanaria de Noticiero Latino, Citlalli Sáenz, desde la Ciudad de México.