Más estados amplían cobertura de salud para inmigrantes ‘sin papeles’, en medio de crisis en la frontera
Por Phil Galewitz/KFF Health News
Cada vez más estados están lanzando programas de seguro médico para inmigrantes -incluyendo a aquellos que viven en el país ‘sin papeles’-, financiados por los contribuyentes, mientras republicanos critican al presidente Joe Biden por un aumento dramático en los cruces no autorizados por la frontera sur.
Once estados y Washington, DC, ofrecen cobertura completa de salud a más de un millón de inmigrantes de bajos ingresos, independientemente de su estatus migratorio, según datos estatales recopilados por KFF Health News. La mayoría son indocumentados, según funcionarios estatales.
La inscripción en estos programas podría llegar a duplicarse para 2025, ya que al menos siete estados están iniciando o ampliando la cobertura. En enero Utah, controlado por los republicanos, comenzará a cubrir a los niños independientemente de su estatus migratorio. Nueva York y California ampliarán la elegibilidad para cubrir a más adultos.
“Estos son niños, y tenemos corazón”, dijo el republicano Jim Dunnigan, representante estatal de Utah, que al principio se oponía al plan de cubrir a niños indocumentados; pero cedió después de compromisos, incluido un límite en la inscripción.
Según estimaciones del Pew Research Center, hay más de 10 millones de personas viviendo en el país ‘sin papeles’. Defensores de inmigrantes y académicos señalan dos factores que aumentaron el interés de líderes estatales en proporcionar atención médica a esta población: la pandemia, que destacó la importancia de la cobertura de salud para controlar la propagación de enfermedades infecciosas, y algunos estados que se centran en personas sin estatus legal para reducir aún más la tasa récord de personas sin seguro en el país.
Según legisladores, los estados también han ampliado la cobertura en respuesta a las súplicas de los hospitales para reducir la carga financiera del tratamiento de pacientes sin seguro.
Todos los estados pagan a los hospitales por brindar servicios de emergencia a algunos residentes sin papeles, un programa conocido como Medicaid de Emergencia. Alrededor de una docena de estados han extendido la cobertura sólo para cuidado prenatal para este grupo. La cobertura completa proporcionada por el estado es mucho menos común, pero está aumentando.
Según una encuesta de KFF-Los Angeles Times, se estima que la mitad de las personas que viven en el país sin un estatus legal no tienen seguro, más de cinco veces la tasa de personas sin cobertura entre los ciudadanos estadunidenses.
Los inmigrantes sin papeles no son elegibles para los programas federales de salud, pero los estados pueden usar su propio dinero para proporcionar cobertura a través de Medicaid, el programa de seguro estatal-federal para personas con bajos ingresos.
California fue el primer estado en comenzar a cubrir a inmigrantes sin considerar su estatus legal, comenzando con niños, en 2016.
“Esto es un verdadero reflejo del conflicto que tenemos en el país y de cómo los estados se dan cuenta de que no podemos ignorar a las comunidades de inmigrantes simplemente por su estatus migratorio”, dijo Adriana Cadena, directora del grupo de defensa Protecting Immigrant Families. Muchas de los millones de personas sin residencia permanente han estado en Estados Unidos durante décadas y no tienen un camino hacia la ciudadanía, agregó.
Estas ampliaciones estatales de la cobertura se producen en medio de una creciente hostilidad hacia los migrantes entre los republicanos.
La Patrulla Fronteriza detuvo a casi 1.5 millones de personas en el año fiscal 2023, después de cruzar la frontera con México. Una cifra récord. Los candidatos presidenciales republicanos han retratado la frontera como una crisis bajo Biden, y a los peligros de la inmigración ilegal, entre ellos el supuesto aumento de la criminalidad, como la principal preocupación nacional.
Simon Hankinson, investigador especializado en temas de inmigración en la conservadora Heritage Foundation, dijo que los estados lamentarán expandir la cobertura a inmigrantes indocumentados por el costo. Puso como ejemplo a Illinois, que recientemente puso una pausa en la inscripción en su programa debido a preocupaciones financieras.
“Necesitamos compartir recursos con personas que contribuyen a la sociedad y no permitir que las personas obtengan beneficios para los que no han contribuido, ya que no veo cómo las matemáticas funcionarían a largo plazo”, dijo Hankinson. “De lo contrario, estarías creando un incentivo para que las personas vengan y obtengan cosas gratis”.
La mayoría de los adultos sin papeles trabajan, representan aproximadamente el 5 por ciento de la fuerza laboral nacional, según el Pew Research Center. California es el estado con más indocumentados con seguro médico estatal, que actualmente cubre a unos 655 mil inmigrantes sin tener en cuenta su estatus migratorio. En enero, ampliará la cobertura a personas de 26 a 49 años, en este grupo, beneficiando a unos 700 mil californianos adicionales.
Connecticut, Maine, Massachusetts, Nueva York, Rhode Island, Vermont, Washington, DC y el estado de Washington también ofrecen cobertura completa a algunas personas que viven en el país sin documentos de migración. Nueva York y el estado de Washington ampliarán la elegibilidad el próximo año.
Oregon, Colorado y Nueva Jersey comenzaron a cubrir a más de 100 mil personas en total en los últimos años, independientemente de su estatus legal. Minnesota seguirá en 2025, dando cobertura a unas 40 mil.
Aunque algunos estados están expandiendo la cobertura de salud, están imponiendo límites en la inscripción para controlar el gasto.
El costo del programa de Utah tiene un tope de 4.5 millones de dólares al año, limitando la inscripción a alrededor de 2 mil niños. El esto de las primas variará según los ingresos, pero no costarán más de 300 dólares al año, con servicios preventivos cubiertos por completo.
“La pandemia destacó la necesidad de tener cobertura para todos”, dijo Ciriac Álvarez Valle, analista senior de políticas, de Voices for Utah Children, un grupo de defensa. “Tendrá un gran impacto en la vida de estos niños”.
Sin cobertura, muchos niños usan las salas de emergencia para atención primaria y las familias no pueden pagar medicamentos, especialistas o internaciones, dijo. “No estoy segura de si esto abrirá la puerta para que los adultos tengan cobertura, pero es un buen paso adelante”, agregó Álvarez Valle.
Colorado también limita la inscripción para la cobertura subsidiada en su programa, estableciendo un límite de 10 mil personas en 2023, y 11 mil en 2024. Los espacios disponibles para 2024 se llenaron en dos días desde el inicio de la inscripción en noviembre.
Adriana Miranda pudo obtener cobertura los dos años.
“Te sientes mucho más tranquila sabiendo que no le debes tanto a los hospitales”, dijo Miranda, de 46 años, que está inscrita en un plan privado a través de OmniSalud, un programa estatal similar al mercado de seguros del Obamacare en el que los residentes de bajos ingresos de Colorado sin residencia legal pueden buscar planes con primas con descuento.
Miranda dejó México en 1999 para seguir a sus dos hermanos a Estados Unidos. Ahora labora en Lamar Unidos, una organización sin fines de lucro que trabaja por los derechos de los inmigrantes.
Antes de tener seguro médico luchaba para pagar la atención de su diabetes y acumuló miles de dólares en deudas después de una cirugía de pie, contó. Bajo el programa estatal no paga una prima mensual debido a sus bajos ingresos, con un copago de 40 dólares para visitas a especialistas.
“Estaba realmente feliz, ¿verdad? Porque pude obtenerlo. Pero sé que muchas personas que también tienen muchas necesidades no lo obtuvieron”, afirmó. OmniSalud cubre sólo a una pequeña fracción de las más de 200 mil personas que viven en Colorado sin papeles, dijo Adam Fox, subdirector de la Iniciativa de Salud del Consumidor, del estado de Colorado.
Pero a partir de 2025 todos los niños en familias de bajos ingresos podrán estar cubiertos por el Medicaid estatal o el Programa de Seguro de Salud Infantil (CHIP), independientemente de su estatus migratorio.
“Hay un reconocimiento creciente de que las personas, más allá de su estatus migratorio, son parte de la comunidad y deben tener acceso a atención médica de manera regular y confiable”, dijo Fox. “Si no lo hacen, agrega costos y trauma a los sistemas de salud y a las comunidades”.
Zach Dyer, productor de audio senior de KFF Health News, colaboró con este informe.