La ciudad que fue cuna de la industrialización se declara en bancarrota

Marco Vinicio González

Noticiero Latino

Tras sufrir una serie de éxodos o abandono a lo largo de su historia, que la mantienen ahora sumida en la peor crisis de desempleo (casi el doble de la media nacional), pobreza y subsecuente delincuencia callejera, como si fuera una inmensa urbe fantasma, la que fuera símbolo del progreso y cuna de la industrialización estadounidense, Detroit se declara en bancarrota.

Las autoridades municipales se acogieron el jueves al Capítulo 9 de protección por bancarrota, convirtiéndose así en la mayor ciudad en la historia de Estados Unidos en declararse en quiebra. La que llegó a ser la cuarta ciudad más poblada del país pidió permiso a un juez para someter una solicitud de protección por quiebra, lo que entre otras calamidades podría significar un despido masivo de empleados municipales, como bomberos, policías, maestros, etcétera, ya que el gobierno local es el mayor empleador de la ciudad, tras la debacle de la una vez próspera industria automotriz.

Además, esta decisión significaría la venta de activos municipales, aumento de tarifas y reducción de servicios de la ciudad, como la recolección de basura y el retiro de la nieve, mismos que ya se hallaban reducidos por insuficiencia financiera, que se agudizó con los recortes presupuestales que entraron en vigor automáticamente con el llamado ‘secuestro’ por falta de acuerdo en el Congreso sobre el presupuesto federal.

Y por si fuera poco, una nueva y poderosa preocupación se levanta en el horizonte de los habitantes de Detroit: El recorte de las pensiones de los retirados, quienes ya de por sí viven en precarias condiciones económicas con ingresos de mil 900 dólares mensuales, reporta The New York Times.

El administrador que nombró de emergencia el estado de Michigan para tomar las riendas o la administración de la ciudad, el republicano Kevin Orr declaró al Christian Science Monitor que no debería cundir el pánico; y que nada cambiará pues todo recomenzará una vez más: “Lo que esto significa, es que nos da una oportunidad para comenzar a abordar algunas de las sobrecargadas deudas de la ciudad, que hemos venido discutiendo…”.

Otras ciudades en situación similar observan con suma atención y preocupación cómo maneja Detroit este percance.