En la recta final de las elecciones, aumentan las trabas para votar
Marco Vinicio González
En la recta final de las elecciones intermedias de 2022, estados gobernados por Legislaturas republicanas no cesan en su intento por suprimir el voto. Particularmente el de las minorías. Más de 30 nuevas leyes de supresión del voto se han promulgado en dos años. He impuesto requisitos de identificación de votantes, límites en la votación por correo, de sitios, horarios y reglas para votar, y líneas distritales manipuladas (gerrymandering), de cara a las elecciones del 8 de noviembre.
Esta retórica del “fraude” en 2020 se ha convertido en ‘mantra’ de campaña que los republicanos afirman “es necesaria para garantizar la integridad de las elecciones… el objetivo es dificultar que voten los votantes que respaldan al Partido Demócrata”, dice la agencia Reuters, que citan estudios del Centro por la Justicia Brennan y el Laboratorio de Derechos Electorales, que rastrean la legislación electoral en todo el país.
En la mayoría de los estados de este país, sostiene la fuente, “las elecciones son supervisadas por funcionarios estatales electos o designados dentro de cada condado; como secretarios y jueces, o con juntas electorales no partidistas o bipartidistas.
Pero según el Laboratorio de Derechos de Voto / Voting Rights Lab, cita la fuente, “los votantes se han visto intimidados por los ‘investigadores’ de la nueva oficina”, que suplantar0n a anteriores funcionarios no partidistas.
“Desde elección de 2020, 25 estados han promulgado leyes que desviaron el poder de los administradores electorales tradicionales y, en muchos casos, cedieron el control a actores partidistas”, concluye la fuente■