Decepciona a algunos la redesignación del Estatus de Protección Temporal del DHS

Inmigrantes latinos con TPS y si el prtestan frente a la casa blanca para que el gobierno otorgue el Estatus de Protección Temporal a los inmigrantes trabajadores que viven en EE UU. Foto: cortesía de National Day Laborer Organizing Network (NDLON).

Marco Vinicio González

El Departamento de Seguridad Nacional (DHS) anunció la rescisión de las fechas de caducidad impuestas por la administración anterior del Programa de Protección Temporal (TPS) para inmigrantes de El Salvador, Honduras, Nepal y Nicaragua, y extensión del mismo para estos cuatro países por los próximos 18 meses.

“… A través de la extensión del TPS podemos ofrecer seguridad y protección continuas a los beneficiarios actuales que son nacionales de El Salvador, Honduras, Nepal y Nicaragua que ya están presentes en los Estados Unidos y no pueden regresar debido a los impactos de los desastres ambientales”, dijo el titular del DHS, Alejandro Mayorkas, en la página web de esta agencia federal. “Continuaremos ofreciéndoles apoyo a través de esta forma temporal de ayuda humanitaria”.

Pero les anuncio no convenció a las organizaciones defensoras de los inmigrantes y su respuesta no se hizo esperar. Por el momento, citamos aquí sólo dos.

Vanessa Cárdenas, Directora Ejecutiva de America’s Voice:

“El anuncio de hoy sobre el TPS es otra oportunidad desperdiciada desde el punto de vista humanitario, económico y político… la administración Biden se limitó a dar lo mínimo. Porque si no es seguro ni prudente retornar a ciudadanos de estos países que llegaron a Estados Unidos en los años noventa, tampoco es seguro ni responsable enviar de vuelta a esos mismos países a quienes llegaron recientemente huyendo de la inestabilidad y la violencia. El gobierno debe tomar las medidas necesarias para proteger a esos otros inmigrantes lo antes possible”.

Y es que Biden está cediendo a la presión no sólo de los republicanos. Un reporte de CBS News cita a funcionarios anónimos de esta administración federal, preocupados de que una expansión del TPS se convierta en un “factor de atracción” de migrantes hacia Estados Unidos. “No obstante, el concepto de ‘factor de atracción’ ha sido ampliamente estudiado y desacreditado (vea este excelente hilo en Twitter de Tom Jawetz, experto legal y en política migratoria)”, dice Cárdenas en un comunicado.

Por su parte, el Centro de Inmigración / Immigration HUB, una organización nacional dedicada a promover políticas de inmigración justas y equitativas a través del liderazgo estratégico, estrategias de comunicación innovadoras, defensa legislativa y asociaciones de colaboración se manifestó también:

“… El Estatus de Protección Temporal es un salvavidas para estas familias inmigrantes. La mayoría de estos titulares de TPS han vivido y trabajado en Estados Unidos durante décadas. Extender estas protecciones temporales permitirá a las familias permanecer juntas sin temor a ser destrozadas, garantizar que los titulares de TPS puedan continuar contribuyendo con su mano de obra esencial a una economía estadunidense que sufre escasez de mano de obra en industrias críticas, y garantizar el flujo de remesas a los países de origen para continuar ayudando a las familias y comunidades”.

(léase al respecto la más reciente entrega de Marbel Hastings y David Torres).

Pero acota: “Sin embargo, estamos profundamente decepcionados de que la administración no haya cumplido con la urgencia más amplia del momento y no haya tomado las medidas necesarias y respaldadas públicamente para redesignar el TPS a estos países”.

Añade: “El Presidente tiene una autoridad estatutaria clara no sólo para extender sino para expandir el TPS a las personas establecidas en Estados Unidos, evitando la deportación a países inestables y peligrosos. La realidad es que si no es seguro para los titulares actuales de TPS regresar a esos países, tampoco es seguro para aquellos que podrían haber protegido con la re-designación”.

De hecho, ampliar el TPS para incluir a más personas “permite que esos migrantes tengan la capacidad de sostenerse económicamente y, al mismo tiempo, pueden ayudar a sus familias en sus países de origen enviando remesas. Esto a su vez contribuye a la estabilización de esos países y reduce la presión de emigrar”, afirmó Vanessa Cárdenas•