Crece tasa de mortandad por falso fentanilo
CA Bridge es un programa de varios niveles destinado a ampliar el uso de medicamentos, como la buprenorfina para los trastornos por uso de sustancias en las salas de emergencias. Sin embargo, la dependencia del programa a una partida única de financiación ha dificultado que los hospitales retengan a los navegadores de salud conductual. Foto: JENNY GOLD/KFF HEALTH NEWS.
Proveedores de salud y expertos en adicciones advierten que una iniciativa en
California que ayuda a pacientes con trastorno por consumo de sustancias a iniciar
tratamientos de largo plazo luego de recibir el alta de salas de emergencias, tiene una
estructura de financiamiento inestable, por lo que algunos empleados críticos ya han
renunciado.
Los partidarios del programa de navegadores de salud conductual de CA Bridge, que
se lanzó en 2022, dicen que depender una sola partida de financiación dificulta que los
hospitales retengan a los navegadores, en medio de una creciente crisis de drogadicción.
En 2022, el año más reciente del que se dispone de datos, 7 mil 385 californianos murieron por sobredosis relacionadas con opioides, de los cuales el 88 por ciento involucró fentanilo, un opioide sintético que puede ser 50 veces más potente que la heroína.
“Esto debería ser muy básico, primeros auxilios 101 para el trastorno por consumo de
opioides, y realmente estamos luchando por mantenerlo”, dijo Andrew Herring, médico
de medicina de emergencias en el Highland Hospital del Sistema de Salud de Alameda
en Oakland, California, y cofundador de CA Bridge.
“Todos están mirando a los demás para que paguen por esto. Los médicos,
enfermeras, trabajadores sociales y administradores de atención están listos para
hacer un trabajo intrínsicamente convincente y maravilloso, pero simplemente no se les
paga por hacerlo”.
El programa de navegadores es uno de los múltiples componentes de CA Bridge, una
iniciativa destinada a expandir el uso de medicamentos para trastornos por consumo de
sustancias en salas de emergencias.
CA Bridge financia la capacitación para médicos y enfermeras con el fin de aumentar el uso de medicamentos recetados, y su programa de navegadores paga a los hospitales hasta
120 mil dólares para contratar trabajadores de salud conductual.
Actualmente se han asignado 284 navegadores para poner a los pacientes en
tratamiento de largo plazo, después de ser dados de alta de una sala de emergencias.
Una vez que haya transcurrido un año, los hospitales tienen la opción de contratar a los
navegadores como personal permanente o dejar que esos contratos expiren. Los
funcionarios de CA Bridge confirmaron que más de 100 navegadores han dejado sus
puestos.
En respuesta, funcionarios estatales dicen que están tratando de expandir el uso de
Medi-Cal, el programa de Medicaid del estado que cubre a personas de bajos ingresos,
para ayudar a pagar a los navegadores presionando a los planes de atención
administrada para que cubran estos servicios.
Los funcionarios dijeron que el estado también está tratando de asegurar subvenciones
federales adicionales hasta marzo de 2025. Sin embargo, el gobernador demócrata,
Gavin Newsom no incluyó nuevos fondos estatales en su último presupuesto que
enfrenta un déficit de 38 mil millones de dólares.
CA Bridge comenzó en 2018, y desde entonces ha recibido casi 100 millones de dólares en
financiamiento federal y estatal, a medida que se ha expandido a través de California.
Hasta enero de 2024, 265 hospitales con departamentos de emergencias, o el 83% de
los hospitales del estado están participando en el programa, y unos 100 hospitales han contratado a navegadores como personal permanente.
Según un informe de CA Bridge de enero de 2023, 76 mil 801 pacientes han recibido
recetas de buprenorfina, y se estima que 34 mil 560 fueron conectados con atención de
seguimiento.
Representantes de la industria de hospitales dicen que más miembros se unirían al
programa si supieran que tendrían un financiamiento sostenible a largo plazo.
El programa concientiza a los médicos sobre los beneficios de recetar medicamentos
como la buprenorfina, que funciona uniéndose a los mismos receptores cerebrales que
los opioides más peligrosos, reduciendo los síntomas de abstinencia.
La buprenorfina, la naltrexona y la metadona son los únicos medicamentos aprobados
en el país para tratar el trastorno por consumo de opioides. Sólo el 10% de los
californianos con trastorno por consumo de sustancias recibieron tratamiento adecuado
en el año anterior, según un análisis de 2022 de la California Health Care Foundation.
Mientras tanto, los navegadores de CA Bridge, que están capacitados en reducción de
daños, salud conductual y alcance comunitario, ayudan a los pacientes a que inicien un
tratamiento a largo plazo después del alta, un paso que puede ser vital y que el sistema
de salud conductual a menudo lucha por completar.
Un estudio en Inglaterra encontró que los pacientes tenían cuatro veces más
probabilidades de morir por una sobredosis de opioides dentro de las 48 horas después
de visitar la sala de emergencias que en otros momentos.
Los pacientes que recibieron ayuda de un navegador tenían una probabilidad más de
tres veces mayor de estar en tratamiento dentro de los 30 días posteriores a su visita a
la sala de emergencias que aquellos que no habían recibido ayuda, halló un estudio
realizado de septiembre de 2021 a enero de 2022 en tres hospitales públicos, incluido
Highland.
Aunque los hospitales que contratan navegadores pueden recibir reembolsos por
facturar a Medi-Cal por servicios de atención médica comunitaria, pocos han negociado
ese beneficio con los planes de salud de Medi-Cal. David Simon, vocero de la
Asociación de Hospitales de California dijo que el servicio es nuevo y que el estado
aún no ha proporcionado orientación sobre cómo facturar los planes de salud.
En el pasado, los partidarios del programa de navegadores han sugerido reducir las
barreras para facturar a Medi-Cal y aprovechar varios fondos estatales.
“Aún no se ha solidificado un mecanismo de financiamiento estatal para sostener los
servicios de los navegadores de manera continua”, escribió el año pasado una
coalición de docenas de proveedores de salud y defensores.
Aimee Moulin, investigadora principal y cofundadora de CA Bridge, dijo que el
programa necesita impulso para frenar una epidemia de muertes por sobredosis.
Agregó que, aunque el programa ha ayudado a expandir el uso de medicamentos para
la adicción a los opioides, aún queda trabajo por hacer para incorporar la atención de la
adicción en más hospitales, y persuadirlos para que la integren.
“Para los trastornos por uso de opioides, tenemos medicamentos altamente efectivos”, dijo Moulin. “No es como si no supiéramos qué funciona. Es sólo cuestión de ponerlos
al alcance”.