Canciones chilenas oaxaqueñas ganan popularidad en los valles de California
Un sábado por la tarde, el joven Salvador Ramírez, de 16 años, ensaya violín junto a su padre y sus tíos.
Sonido de violín…
Ambos son del Grupo Cultural, “Yoso Snuviko”, o “Pueblo de las Nubes”, nombre original de San Juan Mixtepec en mixteco. Es el pueblo en Oaxaca donde los cinco integrantes del grupo tienen sus raíces. Y de donde también vienen estas chilenas.
Corte de música…
La música es una tradición familiar de la familia Ramírez. El bisabuelo era músico y un tío enseñó al padre de Salvador a tocar la guitarra cuando éste tenía 12 años de edad.
Música…
Salvador Ramírez padre, es el líder del grupo:
“El brindis, cuando en las bodas se destapa las botellas, esta es la música que suena”
El “Son del Camino” también se toca durante las bodas, dice Felipe Ramírez, guitarrista del grupo:
“El novio y la novia van agarrados de la mano. Es una pieza que se toca caminando hacia la casa del novio”
Son del Camino…
Además de las bodas, el grupo Yoso Snuviko también alegraotras festividades en el Valle Central de California, como bautizos y cumpleaños. Una de las canciones más conocidas es Achande.
Salvador hijo estudiaba clases de violín en la escuela, pero el programa fue eliminado.
“Yo decidí tocar más porque me encantaba tocar”, dice el joven.
Solo de violín de Salvador Jr….
El papá de Salvador quedó contento:
“Ta’ bien que toque en inglés, pero que toque música de nosotros también”
Música adicional…
La mayoría de las canciones chilenas de San Juan Mixtepec no tienen letra, pero el grupo ha comenzado a integrar algunas historias. La primera la compuso Pedro Ramírez, y se canta en mixteco:
Música…
Otra de las metas del grupo es incorporar a los niños y jóvenes a que bailen las chilenas, afirma Felipe Ramírez:
“Sentimos que nuestra música cada día se va acabando, por eso formamos este grupo para que nuestros hijos aprendan de nuestras culturas y tradiciones de Oaxaca”
Música…
Una de esas tradiciones es alegrar a su comunidad sin sacar un beneficio propio, destaca Salvador:
“Nuestro padre siempre decía que tenemos que alegrar los corazones de nuestra gente nada más, y nosotros lo conservamos como un arte, no lo convertimos en dinero”
Música…
Con esa filosofía, El Grupo Cultural “Yoso Snuviko” está listo para seguir alegrando a sus paisanos oaxaqueños.