Biden-Harris ganaron la Casa Blanca, el foco ahora es el Senado

De la redacción

Las leyes propuestas por la administración federal de turno, las designaciones del Gabinete o los puestos vitalicios como el de los jueces de la Suprema Corte y muchas otras políticas que sustentan el funcionamiento del gobierno deben ser aprobadas por el Senado de Estados Unidos. Pero durante más de una década el líder de la mayoría republicana en esa cámara legislativa, Mitch Mcconnell ha demostrado que no busca el bienestar de las mayorías, pues se ha alineado de forma clara y contundente del lado de los intereses corporativos y de los más ricos.

De esta suerte, ni ganado la Casa Blanca y la Cámara de Representantes será suficiente para corregir el rumbo del país; para hacer realidad aspiraciones y sueños o activar políticas congruente con el momento que se vive si McConnell permanece en su puesto gracias a la mayoría de senadores republicanos en el Senado.

Pero esta mayoría podría cambiar de bando en las elecciones especiales que están por definirse en Georgia el 5 de enero, mismas que podrían cambiar el curso de la historia si los candidatos demócratas derrotan a sus adversarios republicanos, cosa que según las estadísticas parece más que posible en esta ocasión. De esta suerte el estado de Georgia, tradicionalmente republicano, podría pasar del rojo al azul antes de la toma de posesión de Joe Biden y Kamala Harris el 20 de enero.

Georgia es pues el epicentro de la lucha por el futuro del país. En dichas elecciones especiales, por un lado está el candidato demócrata Jon Ossoff, del distrito 6, que compite contra el republicano y titular del puesto, senador David Perdue. Ambos guardan una distancia de un punto porcentual, lo que ubica a ambos candidatos en un empate técnico.

El otro escaño lo disputan la republicana titular del puesto, senadora Kelly Loeffler, contra el demócrata Raphael Warnock, quien aventaja a Loeffer con 6 puntos porcentuales. En otras palabras, el triunfo de Ossoff y Warnock son más que posibles.

Y si ambos candidatos ganan, los demócratas recuperan la cámara alta y podrían ponen fin al imperio obstruccionista del líder McConnell, quien se ha dedicado a bloquear el paso de legislaciones necesarias y urgentes, como el paquete de ayuda por la pandemia del Covid-19 o la Ley de los Héroes, que los demócratas sometieron al Senado desde hace más de 5 meses. O la votación sobre DACA, que blinda temporalmente de la deportación de los jóvenes inmigrantes acogidos al popular programa de los Dreamers o Soñadores, aceptado incluso por muchos republicanos, por citar sólo dos piezas legislativas importantes que está obstruyendo McConnell.

En tanto, los estadunidenses se tienen que ‘rascar con sus propias uñas’ para enfrentar las varias crisis derivadas de la pandemia del coronavirus, en lo relativo por ejemplo a la salud, física y mental, la economía, el desempleo masivo, etcétera.

Por eso la lucha que se libra en estos momentos en Georgia no debería ser sólo de las personas que se movilizan allá, sino una lucha de todos los que aspiran a contar con un Senado que dé curso a las propuestas legislativas que esperan ser votadas en el pleno de esa cámara, para echar a andar de nuevo la economía y a vida social, y para poder prevenir nuevas catástrofes en este país.

La Elección Especial en Georgia para los dos escaños en el Senado federal son el 5 de enero. Para votar, es requisito legal Registrarse y luego también puede solicitar una boleta para la Votación Temprana y enviarla por correo. Pero para votar en persona necesita una Identificación Oficial con Fotografía (voter ID).

Recuerde, el futuro puede estar en sus manos, ya sea votando o ayudando a movilizar el registro y el voto temprano o por adelantado en estas elecciones especiales del 5 de enero en Georgia, por dos escaños que podrían alterar la correlación de fuerzas en el Senado.

Vale recordar que actualmente en los procesos electorales hay 27.3 millones de votantes latinos elegibles. Y que el 42 por ciento del electorado en general en 2025 estará formado por personas de color, lo que sin duda cambiará el panorama político de la nación para los años subsecuentes■