Manuel Ocaño

Noticiero Latino, San Diego, CA

David Amaya fue detenido al cruzar como indocumentado la frontera de San Diego, pero la Patrulla Fronteriza descubrió que se trataba de un estadunidense que fue secuestrado por su padre hace 30 años y llevado
a México sin consentimiento de su madre, quien desde entonces lo busca.

A la Patrulla Fronteriza lo único que se le ocurrió fue dejar a Amaya en los valles del centro de San Diego solo, sin conocer a nadie, sin un centavo en el bolsillo y sin hablar inglés.

El pastor Freddy Rivera lo encontró cuando deambulaba por las calles.

David ya contactó por teléfono a su madre, Kathy Berry, en Illinois.

Los feligreses de la Iglesia de Cristo ahora reúnen fondos para enviar al indocumentado estadunidense con su madre.