Texas podría cerrar una escuela que enseña a los que abandonaron los estudios

La crisis de deserción escolar ha sido señalada como una prioridad por el gobierno federal. Se estima que sólo 7 de cada 10 latinos y afro americanos se gradúan de la preparatoria. Una escuela autónoma en Texas se dedica a enseñar a los estudiantes que habían abandonado los estudios y los ayuda a graduarse. Pero el estado está a punto de cerrar esta escuela, porque dice que no cumple con las metas académicas y financieras fijadas para todas las escuelas. ¿Deben las escuelas que sirven a los estudiantes en riesgo de abandonar los estudios, tener que cumplir con los mismos estándares que todas las demás? Joy Díaz reporta desde Austin, TX.

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La vocera de la Agencia de Educación de Texas, Debbie Ratcliffe dice que la nueva ley del estado tiene metas muy claras. Entre otras cosas, le da a la agencia de educación la autoridad de revocar las licencias de las escuelas autónomas deficientes.

RATCLIFFE: Si catalogamos una escuela como “deficiente” a lo largo de 3 años consecutivos, ya sea a nivel académico o a nivel financiero, entonces debemos cerrar la escuela automáticamente.

Muchos estudiantes de American Youthworks tardan más de 4 años para graduarse. 9 de las 12 mamás adolescentes en el programa este año se van a graduar a tiempo o antes de tiempo. Foto: Joy Díaz

Muchos estudiantes de American Youthworks tardan más de 4 años para graduarse. 9 de las 12 mamás adolescentes en el programa este año se van a graduar a tiempo o antes de tiempo. Foto: Filipa Rodrigues

Hay seis escuelas en el estado que son considerados deficientes, y que la Agencia quiere cerrar. Una de ellas es American Youthworks, que es una de las pocas escuelas autónomas a nivel nacional que se especializa en graduar a estudiantes que habían abandonado sus estudios.

Parc Smith es el Director Ejecutivo de American Youthworks y dice que su escuela es poco común.

SMITH: La mayoría de nuestros estudiantes llegan a los 18 años de edad y ni siquiera han terminado la mitad de sus estudios secundarios. Nosotros los ayudamos a recuperarse para que puedan graduarse y de ahí los ayudamos a ir a la Universidad o a que perfeccionen un oficio.

Smith dice que los estudiantes poco convencionales requieren de escuelas que les enseñen de manera poco convencional. Por ejemplo, a algunos de los estudiantes, les toma seis, siete, o hasta 10 años graduarse. En un tour por el plantel, Smith abre una puerta.

En la escuela American Youthworks, las mamás adolescentes comparten un salón de clases con sus hijos de menos de un año. Foto: Joy Díaz.

En la escuela American Youthworks, las mamás adolescentes comparten un salón de clases con sus hijos de menos de un año. Foto: Filipa Rodrigues

SMITH: Este salón de clases no es el típico salón de clases. Tenemos mecedoras para que las mamas que están amamantando puedan tener a su bebe. Tenemos tapetes y juguetes para los niños.

Sonido ambiental del salón

En esta clase, las madres adolescentes hacen sus labores escolares en sus computadoras portátiles mientras sus bebes, de menos de un anido, interactúan con sus mamas.

Este salón es un ejemplo de uno de los éxitos de la escuela. De las 12 madres adolescentes que están en el programa este año, 8 se van a graduar a tiempo, y 1 antes de tiempo.

La Agencia de Educación de Texas ha oído de algunos de los éxitos que American Youthworks ha tenido durante las 3 décadas que lleva en operación. Pero eso no impresiona a la señora Ratcliffe.

RATCLIFFE: Bueno, ninguna escuela es mala del todo. Todas tienen sus virtudes.

Una de las virtudes de American Youthworks es que en los 30 años en operación, solo han tenido dos incidentes de disciplina. Pero la Agencia estatal no se basa en las virtudes de las escuelas. Sus evaluaciones mas bien van quitando puntos por cada cosa que la escuela haga mal. En el caso de American Youthworks, perdió puntos por otro plantel que antes operaba, dice su director Smith.

SMITH: Ahora nos dicen que tenemos una deficiencia académica por un plantel que nosotros mismos decidimos cerrar hace anos —- en el 2010.

Parc Smith es el director de American Youthworks, una escuela autónoma que se dedica a enseñar a los jóvenes que ya habían abandonado los estudios. Foto: Joy Díaz.

Parc Smith es el director de American Youthworks, una escuela autónoma que se dedica a enseñar a los jóvenes que ya habían abandonado los estudios. Foto: Filipa Rodrigues.

La Agencia de Educación también considera que la escuela tiene demasiados maestros para el numero de alumnos. La escuela se enorgullece de esto, puesto que además de los maestros reglamentarios, también tiene a instructores de oficios como mecánica automotriz y a los de ingeniería y arquitectura ecológica.

Por ultimo, la escuela tiene deficiencias económicas, según el estado.

SMITH: Bueno, el problema se resuelve básicamente con 7 dólares y 62 centavos.

Para entender a Smith, vale la pena mencionar que la Agencia de Educación de Texas especifica donde las escuelas pueden invertir sus fondos y donde no, porque algunas escuelas habían perdido fondos en la inversión. American Youthworks durante anos, invirtió en programas que le pagaban un interés mayor al que aprueba la agencia. La escuela dice que llego a ganar casi MIL veces mas de lo que hubiera ganado de haber invertido como lo reglamenta el estado.

SMITH: Así que, a fin de cuentas, nos pueden cerrar porque en vez de ganar $7 dólares y 62 centavos de interés, nos ganamos $7 mil dólares. Como que algo esta mal con esa lógica, no?

Smith ahora invierte en cuentas aprobadas; dice que la escuela esta corrigiendo todos sus errores. Pero, al parecer aun así el estado piensa cerrarla.

Así que la escuela se está movilizando. Por un lado, levanto una demanda en la corte. Por otro lado, le ha pedido a sus graduados y a sus estudiantes que sirvan como embajadores a favor de la escuela. Uno de estos embajadores es Rubén Castro Jr., quien se graduó de American Youthworks hace 14 años.

CASTRO: Estamos construyendo un fraccionamiento solar de cinco estrellas, equipado con agua de lluvia.

Rubén Castro se graduó de American Youthworks, después de una adolescencia difícil. Ahora es gerente de una compañía de construcción ecológica. Foto: Joy Díaz

Rubén Castro se graduó de American Youthworks, después de una adolescencia difícil. Ahora es gerente de una compañía de construcción ecológica. Foto: Filipa Rodrigues

Castro es el gerente de una compañía de construcción ecológica que se llama “La Casa Verde”. Al igual que la mayoría de los estudiantes de American Youthworks, Castro tenia dificultades cuando era adolescente – su talón de Aquiles eran las drogas – y como su ciudad natal no tenia ningún programa para adolescentes adictos, sus padres lo mandaron a Austin.

CASTRO: Creo que estoy feliz – bueno, no creo – más bien – estoy feliz de ver hasta donde he llegado. Yo soy casi casi el mero mero de aquí.

Ahora, Castro es mentor de algunos estudiantes de American Youthworks. Inclusive acaba de contratar a un par. Y es que Castro se ve reflejado en estos muchachos. Se acuerda de que el también quería tirar la toalla y no seguir con la escuela. Por eso les aconseja…

CASTRO: Tomen la opción A – si saben que les va a convenir – no se vayan por la opción B o C. Todos podemos escoger la primera opción.

Castro y muchos de los actuales estudiantes y maestros quieren que la agencia de educación escoja otra opción para la escuela. Ahora eso dependerá de la corte. En caso de que el juicio salga a favor del estado, la escuela tendrá que cerrar sus puertas a fines del ano escolar.

Para la Edición Semanaria de Noticiero Latino, soy Joy Díaz, desde la ciudad de Austin, Texas.

Este reportaje es parte de American Graduate, Let’s Make it Happen!, una iniciativa de los medios públicos para tratar la crisis de deserción escolar, con el apoyo de la Corporación para la Difusión Pública.

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